Desde hoy y hasta el 14 de octubre, se desarrollará la Feria del Libro de Francfort, considerada el evento editorial más grande del mundo. En esta edición, la invitada de honor es Cataluña, que aportará la presencia de unos 100 escritores y 800 artistas de la región. La magnitud del evento queda al manifiesto al repasar sus números: se organizarán 140 actos literarios y 63 espectáculos en apenas seis días.
La delegación catalana se ha visto envuelta en polémica, ya que todos los elegidos escriben su obra enteramente en catalán. Así, reconocidos autores catalanes que trabajan en castellano como Enrique Vila-Matas, Juan Marsé, Eduardo Mendoza y Javier Cercas no han sido seleccionados para participar de la feria. La resolución, aprobada por el Parlamento Catalán, tiene como objetivo potenciar la literatura desarrollada en el idioma regional. Sin embargo, la diputada Eva García (PP) consideró que el resultado de la decisión es “expulsar de la catalanidad a los autores que escriben en castellano”.
Entre las actividades organizadas, se destacan la exposición sobre literatura y cómics catalanes, las litografías de Miró, el montaje de obras de teatro y los conciertos de la Orquesta Sinfónica de Barcelona y de la Orquesta Nacional de Andorra. También se proyectarán películas como “Honor de cavallería” y “En la ciudad”.
Por otra parte, Narcís Comadira, Arnau Pons, Harald Hartung y Armin Senser, entre otros autores, participarán de una experiencia denominada “Contrabando de versos”, donde poetas catalanes y alemanes se traducirán mutuamente.
El discurso inaugural de la Feria del Libro de Francfort corrió por cuenta de Quim Monzó, quien sorprendió al realizar su presentación en forma de cuento donde repasó la historia de la cultura catalana. Monzó comentó su sorpresa por la elección de Cataluña como invitada de honor, ya que se trata de una cultura “repartida entre varios Estados, en el que en ninguno es lengua realmente oficial”.
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