El viernes pasado (12 de agosto), en nombre de la religión y tratando de hacer cumplir una fetua, un hombre se aproximó a Salman Rushdie en Nueva York y lo dejó herido de gravedad tras propinarle varias puñaladas en las zonas de la cara, el cuello y el tórax.
El creador de “Los versos satánicos”, ante la vista de varias personas que se habían congregado para oírlo en el marco de una actividad de carácter literario, fue asistido de inmediato y trasladado a un centro médico de Pensilvania. Simultáneamente se detuvo a Hadi Matar como autor del ataque, cuentan desde La Nación.
Andrew Wylie, el agente de Rushdie, en un primer momento dejó trascender que la agresión perjudicó el hígado de Salman, además de provocar serios daños en un brazo y en uno de los ojos (se ha dicho que puede llegar a perder el derecho). Con el correr de las horas, las noticias fueron más alentadoras, dando paso a la esperanza dada la evolución favorable que evidencia el intelectual, a quien se le ha quitado el respirador artificial. Zafar, su hijo, expresó en un comunicado citado por CNN en Español y otros medios, que este atentado transformó la vida de su padre pero no logró alterar su “sentido del humor”, que permanece tan “desafiante” y “luchador” como antes.
Reacciones de colegas
La noticia, como era de esperarse, tuvo relevancia internacional. En redes sociales, múltiples exponentes del universo literario se manifestaron al respecto. Una de las autoras que decidió solidarizarse con Rushdie fue J.K. Rowling, recibiendo a partir de su comentario en Twitter una amenaza de muerte por la cual la policía de Escocia inició una investigación, informa Infobae.
En palabras de Alberto Chimal, la acción criminal dirigida a Salman no tiene justificación y es “horrenda”, mientras que Javier Sierra dejó en claro su “desprecio” y desaprobación en relación a “los fanáticos” que apoyan esta agresión.
Rosa Montero (calificando al hecho como un “horror”), Manuel Vilas (reflexionando sobre la violencia que encuentra víctimas a diario, aunque el ser perjudicado no publique libros), Carlos Fong (aludiendo al poder que posee la palabra y a cómo la literatura puede ser un arma frente al “dogmatismo” y la “intolerancia”) y Sergio Ramírez (considerando que el atentado contra Salman constituye una “agresión” hacia la literatura en su conjunto y que los fanatismos no podrán ganarle jamás al poder que tiene “la invención” en materia literaria) son otros de los escritores movilizados por las puñaladas que intentaron llevar a Salman Rushdie a la muerte.
Links relacionados:
https://blogs.elespectador.com/cultura/en-contra/donde-estan-los-versos-satanicos
https://blogs.elpais.com/fondo-de-armario/2014/02/la-perpetua-condena-a-muerte-de-rushdie.html
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