La lección de anatomía de Rembrandt-tulp

José Hierro

 Poema siguiente



Los tiempos cambian, Rembrandt. No es preciso
romper el coco: no hay que ser violento.
Cójase a un vivo, al que sin previo aviso
se le inyecta en las venas un pigmento.
El contraste, ni raudo ni remiso,
llega hasta el arrabal del pensamiento.
(Los voyeurs, observando la pantalla
aplauden si el paciente se desmaya.)

Ver métrica Poema siguiente 

 Volver a José Hierro
Llevate gratis una Antología Poética ↓

Recibe el ebook en segundos 50 poemas de 50 poetas distintos