La semana pasada informábamos acerca de “La soledad del juzgador, Gómez Bermúdez y el 11-M”, el libro que escribió la esposa del magistrado que actuó en el juicio por los atentados de 2004 en Madrid. Allí, Elisa Beni compara a su marido con el piloto de F1 Fernando Alonso y con Santo Tomás de Aquino. La actitud de la escritora y periodista fue calificada como una “frivolidad” para con las personas que sufrieron los ataques terroristas. Por otra parte, se ha criticado la cercanía de la publicación de la obra con la sentencia del juicio, y el destino de las ganancias económicas que se deriven de la venta de ejemplares.
“Pido perdón de todo corazón si alguna víctima se ha sentido ofendida”, declaró Beni en la presentación oficial del libro realizada en el Círculo de Bellas Artes de Madrid. Cabe recordar que Alfonso Guevara, uno de los integrantes del tribunal, dijo sentirse “dolido” e “indignado” por el modo en que aparece retratado en la publicación. La presidenta de la Asociación 11-M Afectados por el Terrorismo, Pilar Manjón, también expresó su malestar con Beni.
La escritora aseguró que admira a todos los jueces y fiscales que participaron del proceso, al igual que a las asociaciones de víctimas del terrorismo. “Acepto de buen grado todas las críticas como un acicate para mejorar. Pero espero que mis críticas también se tomen con benevolencia”, pidió la autora.
De los 18 magistrados que conforman la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional, apenas dos mujeres han asistido a la presentación de “La soledad del juzgador, Gómez Bermúdez y el 11-M”: las jueces Ángela Murillo y Manuela Fernández de Prado. Tampoco asistieron representantes de la Fiscalía, mientras que muy pocos funcionarios que trabajan en el tribunal se acercaron al acto.
Comentarios1
Hay ver lo que hay que leer cuando quien escribe no se ha leido el objeto motivo de las discrepancias, que es el libro escrito por la periodista.
La A.N. es un exponente del deporte nacional, que es la envidia.
Alfonso Guevara se molesta porque queda en evidencia en el libro, con solo citar lo que ha dicho o ha hecho.
Pilar Manjón es una boca sin cerebro, que por soltar titulares dice cualquier cosa, como eso de "mojar la pluma en la sangre de las víctimas" parafraaseando lo que ha hecho su ex marido.
Resulta sorprendente que la autora pida disculpas por lo que ha escrito, pues en el libro se defiende y ensalza a la magistratura, y a todos los jueces que juzgan en soledad.
El Mundo, quiere cargarse al juez que le destruyó su teoría de la conspiración.
Jiménez Losantos es una vívora que sólo puede convencer o engañar a descerebrados que no piensan.
Luis del Pino, es un embustero integral, un trepa, ya que como ingeniero no alcanzó lo que él tanto quería, como el dinero, la popularidad y la fama, pero él solo ya es por sí un agujero negro en la historia de la comunicación. Se nota que no ha estudiado deontología periodística, ni ninguna otra.
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