Dos pequeñas-grandes editoriales en la #FLM18

Una de las cosas que más llama mi atención cada vez que me encuentro con lectores es el descubrimiento de nuevas editoriales. Aunque vivo moviéndome para conocer nuevos proyectos editoriales, siempre que charlo sobre libros con alguien descubro un nuevo nombre. Este año, mi visita a la Feria del Libro de Madrid tenía un objetivo claro: encontrarme con editores nuevos, conocer el trabajo que hacen y charlar sobre el proceso de construcción de un libro. He visitado muchas casetas y descubierto trabajos interesantes. Y de todas esas charlas y ese descubrimiento he rescatado el trabajo de dos editoriales que están haciendo cosas realmente bellas. Las rescato y las uno porque más allá de trabajar con géneros diferentes se parecen en cuanto a que no sólo ofrecen contenido de calidad sino que también cuidan muchísimo la estética. Rescatar el libro como objeto de arte me parece una de las actitudes más bonitas y necesarias en estos tiempos de superficialidad y autopublicación.
 
 

Tres Hermanas Ediciones

Ponerle cara a Cristina Pineda, quien desde hace un tiempo ha confiado en mi pasión lectora compartiendo conmigo algunos de sus libros –tales como «El jardín colgante» de Patrick White o «Luciana» de Pilar Tena— ha sido una experiencia gratificante. Es fabuloso poder traspasar los límites de la pantalla y tocar el gesto y la voz de otras lectoras a las que admiras.

Caseta de Tres Hermanas y Silex en #FLM18

Tres hermanas es una editorial que tiene tres años de vida y que supone un proyecto apasionante desarrollado por Cristina Pineda y Marina Sanmartín Pla. Incluye una línea de literatura extranjera donde se asoman nombres ineludibles de la tradición anglosajona en ediciones que se convierten en amores a primera vista. Mi favorita, esa edición de «El diario de Virginia Woolf» que es una delicia que hasta te da miedo abrir con tal de no estropearla.

Algunas maravillas de Tres Hermanas Ediciones

Foto: Tres Hermanas

El trabajo independiente, quienes trabajamos a contracorriente lo sabemos, es arduo, es un apostar a veces a ciegas en proyectos que no tienes la seguridad que vayan a salir adelante. La valentía, sin embargo, es uno de los rasgos de Tres hermanas, que acaba de publicar «El tutor» de Anna María Bunn, la primera novela austríaca publicada por una mujer. Una obra que pinta deliciosa y sobre la que espero poder escribir pronto.

Durante mi paso por la feria tuve la suerte de coincidir con Pilar Tena y charlar sobre Luciana, esa novela que recomendé no hace mucho y cuya reseña puedes leer aquí. Sin duda, ha sido un encuentro de mujeres fuertes y necesarias que me ha llenado de energía. ¡No te pierdas el trabajo delicioso de Tres Hermanas!

Pilar Tena en la #FLM18

Jekyll & Jill

Una de las razones por las que viajé a Madrid fue para poder conocer a Eduardo Halfon, autor de «Duelo» y de obras que rondan en torno a la memoria histórica del pueblo judío. A través de él conocí a Víctor Gomollón que es quien está detrás de la editorial Jekyll & Jill. Si bien ya me habían hablado mucho de ella hasta el momento no había dado con sus libros. ¡Qué sacrilegio! El trabajo de edición y estética de los libros es impresionante y Víctor es un lector apasionado que hace de los libros un espacio de exploración y de experimentación.

Jekyll & Jill es un caso de valentía que roza el delirio. Viajemos al año 2011. La situación del libro era complicada. La crisis del sector editorial estaba en su momento más desesperante. ¿Qué otra cosa se le puede ocurrir a alguien apasionado de la literatura? Pues montar una editorial con calidad tanto en el contenido como en la estética. Así comenzó Jekyll & Jill, una deliciosa editorial independiente que regenta Víctor Gomollón.

Foto: Jekyll&Jill

El objetivo de Víctor es publicar libros de calidad, ajenos a las tendencias, afincados en temas que sirvan para reflexionar sobre la realidad y cuidando meticulosamente su estética. Son ediciones artesanales, en las que se ha prestado atención a cada detalle: a la tipografía, al papel, a todo lo referente con la edición. Cada libro, pasa por sus manos, cada libro diseñado con mimo y pasión lectora. Una pasión que roza el fetichismo y nos permite hacernos con ediciones únicas, preciosas y de excelente calidad.

Eduardo Halfon junto a la librera Pilar Eusamio

Foto: Jekyll&Jill

Un ejemplo del delicado trabajo de Jekyll & Jill es «Saturno» de Eduardo Halfon, una carta que un escritor dedica a su padre y que es traspasada por la presencia de escritores suicidas. El libro con el que Halfon se lanzó al mundo de la literatura en una edición fabulosa, de tipografía clara y un aspecto semisolemne que permite percibir a través de su estética el tono que tiene la obra. ¡Imposible no hacerse con esta joya!

Hay que hacerle caso a Antonio Martín Fernández, ¡nadie debería perderse el trabajo de Jekyll&Jill!

Foto: Jekyll&Jill



Debes estar registrad@ para poder comentar. Inicia sesión o Regístrate.