La mujer, protagonista indiscutible de las obras de Virginia Woolf

Cuando hablamos de la escritora Virginia Woolf, estamos haciendo referencia a una de las figuras más importantes de la Historia de la Literatura. Y es que fue uno de los pilares del Modernismo del siglo XX. Pero no sólo por eso, sino también porque se convirtió en una de las más importantes impulsoras del Feminismo.

De ahí que si algo tienen en común la mayoría de sus obras es que toman como protagonistas a mujeres así como a los miedos, sueños, deseos e inquietudes de las mismas. Las olas (1931) o Al faro (1927) son algunos de sus trabajos más significativos a este respecto.

No obstante, te recomendamos que tampoco pierdas la oportunidad de disfrutar leyendo estos otros igualmente significativos:

Una habitación propia. En el año 1928 fue cuando se llevó a cabo la publicación de este ensayo que fue utilizado por su autora para dar a conocer la evolución del papel de la mujer en la Literatura.

Sin embargo, la principal seña de identidad del mismo es el hecho de que se encarga de reivindicar la necesidad de que cualquier fémina con talento pueda encontrar un hueco en ese mundo, que siempre ha sido ocupado y desarrollado por hombres que, en muchos casos, se dedicaron a entorpecer o a ocultar las grandes obras creadas por personas del sexo opuesto.

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La señora Dalloway. Dentro de la bibliografía de Virginia Woolf es especialmente importante esta novela, publicada en 1925, pues a través de ella la autora consigue dar a conocer todas sus ideas acerca del feminismo e incluso de la represión sexual a la que se ve sometida en muchas ocasiones la mujer.

Todo ello lo plantea a través de una narración que tomo como protagonista a Clarissa Dalloway, un miembro de la alta sociedad de la Inglaterra posterior a la Primera Guerra Mundial. A aquella la conoceremos a través de los preparativos que está llevando a cabo para organizar una fiesta.

El desarrollo de la celebración, el suicidio de un joven, la relación matrimonial de aquella dama con su esposo que es un diputado conservador e incluso el papel de madre con su hija adolescente son los pilares de este libro que ha sido considerado como uno de los mejores del siglo XX.

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Entre actos. El último trabajo que escribió la pluma que nos ocupa es este, que vio la luz en el año 1941, después de que aquella se quitara la vida.

La representación de una obra teatral en un pueblo inglés cuando está a punto de estallar la Segunda Guerra Mundial es el escenario que se elige por parte de la autora para desplegar y plasmar todas las ideas e inquietudes que se alojaron en su cerebro durante toda la vida. En concreto, al leer las páginas de este libro descubrimos no sólo el deseo de que la mujer ocupara un papel más importante en la Literatura sino también su ambivalencia sexual, que tanto ha dado que hablar sobre Woolf.

Tres grandes obras estas que, sin duda alguna, merece la pena conocer para entender el importante papel que esta pluma ocupa dentro del mundo de las letras y las palabras.



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