El mar, la tetralogía de Pío Baroja que no debes perderte

Sin lugar a dudas, una de las más ilustres plumas que ha tenido España a lo largo de la historia es la de Pío Baroja (1872 – 1956). Y es que contaba con una calidad narrativa innegable que ha quedado plasmada en obras que ya son “clásicos”, tales como El árbol de la ciencia (1911), Zalacaín el aventurero (1908) o Camino de perfección (1901).

En este caso, queremos ir un poco más allá de esos libros tan afamados y deseamos darte a conocer una tetralogía, la segunda de toda su carrera, que te puede resultar muy interesante. Nos estamos refiriendo a la llamada El mar, que está conformada por estos trabajos:

Las inquietudes de Shanti Andía (1911)

Shanti Andía es precisamente el nombre del protagonista de esta novela, un hombre ya anciano que viene a rememorar su vida, trayendo consigo al lector su pasión y su nostalgia por el mar de décadas atrás, donde se vivían numerosas aventuras.

Esos recuerdos le hacen retrotraerse hasta su infancia, donde fue huérfano de padre y creció junto a su madre. Desde su tierna infancia soñó con ser como su tío, el marino Juan de Aguirre. Por eso, cuando reciben la noticia de que ha fallecido, no duda en inscribirse en la Escuela de Náutica para hacer realidad ese objetivo.

Y lo conseguirá porque, a partir de ese momento, vivirá mil y una aventuras, como convertirse en capitán de una fragata. Todo eso sin pasar por alto una larga lista de escarceos amorosos, conflictos pasionales e incluso un misterio que gira en torno a su tío.

El laberinto de las sirenas (1923)

La segunda de las novelas de la saga El mar es esta, que sigue teniendo como protagonista a Andía. En este caso, se sitúa en Nápoles a comienzos del siglo XX, donde conocerá a la anciana marquesa de Roccanera, que parece ocultar muchos secretos de su pasado.

Y podrá ir descubriéndolos poco a poco al hallar la autobiografía manuscrita del que fuera administrador de una finca de aquella noble. Nos estamos refiriendo a la autobiografía de un marino vasco que responde al nombre de Juan Galardi.

Los pilotos de altura (1929)

La tercera entrega de esta serie creada por Pío Baroja es la que tienes ahora delante. Gira en torno a la figura de un capitán del siglo XIX llamado Abaroa, un marino sin escrúpulos que no solo se ve envuelto de forma constante en numerosos conflictos pasionales sino que también afrontará tempestades, persecuciones, ataques piratas e incluso negocios relacionados con el tráfico de esclavos.

Y con él aparecen en escena otros marineros con los que, de un modo u otro, mantendrá cierta conexión como será el caso de Chimista.

La estrella del capitán Chimista (1930)

Completar la novela anterior fue lo que hizo el escritor al desarrollar este otro libro, donde los protagonistas de la tercera parte volverán a hacerse presentes para que el lector pueda conocer las nuevas aventuras que afrontan.

En concreto, se descubrirá sus andanzas por países exóticos a bordo de barcos de vela.

¿Qué te parece esta saga marinera?



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