Isabel Keats, respuestas en 280 caracteres

Hace unos años, diversos libros firmados por Isabel Keats tuvieron visibilidad en Poemas del Alma a través de un artículo publicado por María Merino.

Como la producción de la escritora detrás de ese seudónimo ha seguido en aumento, varios trabajos suyos se tradujeron a múltiples lenguas y resulta interesante conocer en profundidad su labor creativa, esta vez quisimos darle espacio a ella invitándola a responder, a distancia, un cuestionario breve.

En caso de querer contactar a esta novelista nacida en Madrid que se ha licenciado en Publicidad es posible escribirle por redes sociales o dejarle un mensaje en su sitio web. Si desean darle una oportunidad de lectura a obras de su autoría, en tanto, apresúrense para conseguir algún ejemplar de “Me vuelves loco”, “El cielo de Kenia tiene otro color”, “Los príncipes solo viven en los cuentos” y “Lobo negro”, por ejemplo.

– ¿Cómo te las ingenias, a qué recursos o estrategias apelas, para intentar ofrecer novelas románticas originales, creíbles e inspiradoras?
– Siempre pienso en lo que me gustaría leer a mí. Primero se me suelen ocurrir los protagonistas; descripción, carácter, habilidades, virtudes, defectos… y luego me planteo qué trama se adaptaría mejor a ellos.
– Según tu experiencia, ¿resulta más sencillo iniciar un relato o darle un final? ¿Razones?
– Claramente iniciarlo. La prueba de ello es que tengo bastantes historias empezadas y algunas no parece que vayan a ver nunca su final. ¿Razones? Diría que influye la personalidad del autor; en mi caso, que soy bastante desorganizada.
– De todos los personajes que llevas diseñados, ¿cuál ha sido el más complejo de componer? ¿Cómo lograste ir venciendo las dificultades creativas?
– Todos y ninguno, porque mis personajes son “reales”, por así decirlo. Los hay encantadores y de bofetada, claro, pero siempre creíbles. Trato de reflejar seres humanos que acaban siendo la mejor versión de sí mismos, y es el propio personaje el que va creciendo casi sin mi ayuda.
– ¿Qué sensaciones y sentimientos te despierta tu producción literaria? ¿Motivos?
– Cuando miro hacia atrás y veo que ya llevo más de veinte novelas (sí, lo confieso, he perdido la cuenta), no puedo evitar sentir una mezcla de sorpresa y orgullo. Aunque, siendo completamente sincera, si releo algo de lo mío a veces me digo: «Pero ¿de verdad he escrito yo esto?».
– Si “El cielo de Kenia tiene otro color” no fuera una obra de tu autoría, ¿qué devolución, comentario, mensaje o consulta le harías llegar a su artífice después de leer el libro?
– He ido de safari a Kenia de tu mano. He oído el barrito de los elefantes, el rugido del león, la risa de las hienas… pero, sobre todo, he vivido paso a paso el amor a fuego lento entre Beka y MJ.