Casi 2.500 seguidores tiene la escritora española Ángela Vallvey en Twitter. Entre ellos, sus colegas Lorenzo Silva, Javier Sierra, Montero Glez, Carmen Amoraga, Juan Cruz Ruiz y Marta Rivera Cruz.
En la red social del pajarito, Vallvey suele publicar numerosos mensajes con contenido político. Por esa vía la contacté hace algunas semanas con el propósito de, con el formato ya clásico de esta sección basado en cinco preguntas para respuestas de 140 caracteres como máximo, poder conocerla mejor.
La información que la creadora de títulos como “Los estados carenciales” (distinguido con el Premio Nadal), “No lo llames amor”, “Todas las muñecas son carnívoras”, “Muerte entre poetas” (finalista del Premio Planeta), “El hombre del corazón negro” y “Mientras los demás bailan” volcó en este cuestionario constituye una invitación a descubrir sus pensamientos, deseos, sensaciones y proyectos.
De seguir leyendo, encontrarán una interesante combinación de política y literatura, dos universos que le permiten a Ángela Vallvey llegar a diferentes personas a través de la palabra. Algunos, seguramente, se identifiquen con ella por sus reflexiones; otros, tal vez disfruten su habilidad narrativa y hasta habrá quienes incluso la critiquen por sus declaraciones o sus obras, pero nadie resulta indiferente a los dichos e historias de esta autora nacida en San Lorenzo de Calatrava.
– Acostumbras realizar comentarios políticos y no ocultas tu postura. ¿Crees que tus opiniones te llevan a ganar o perder lectores? ¿Razones?
– Hago comentarios políticos, pero mi postura no es ideológica. Señalo hacia la injusticia cuando la veo. Si pierdo un lector, otro ganaré.
– En TW contaste tu deseo de conseguir empleo en el extranjero y emigrar… ¿Por qué esta necesidad de pensar un futuro lejos de España?
– No me siento libre en España, por eso deseo emigrar. No será la primera vez que lo haga. Cuando he vivido fuera, he amado más a «estepaís».
– ¿A qué clase de lector intentas cautivar con tus libros?
– A los que se guían por el raciocinio y poseen un espíritu libre, a los que aman el conocimiento y no se dejan cegar por tópicos o sectas.
– Además de la posibilidad de contar historias y ganar premios, ¿qué te da la literatura?
– Como lectora, me ha aportado lo mejor de mi vida. Es mi gran tesoro. La riqueza no tiene por qué ser sólo material. De hecho, no lo es.
– ¿Con qué aspiraciones profesionales te encuentra este año?
– Me gustaría publicar un libro. Y sobrevivir. Quiero decir: resistir.
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