El 5 de abril de 1835 se produjo en la comunidad de Cantabria el nacimiento de Gumersindo Laverde Ruiz, el descendiente de Asunción Ruiz Puertas y Toribio Laverde González, un matrimonio que poco después de agrandar la familia se instaló en Nueva, un poblado del concejo de Llanes. Allí, el futuro intelectual aprendió a escribir y comenzó a dominar el latín.
En 1847, Gumersindo se instaló en Oviedo y se especializó en Filosofía. Años más tarde, ampliaría sus conocimientos en las universidades de Valladolid y Salamanca antes de fijar su residencia en Madrid, donde se desempeñó como empleado de la Secretaría de la Junta de Beneficencia. Con el tiempo, sumaría experiencia como profesor de Retórica, Literatura Latina y Literatura española, además de incursionar con gran éxito en el campo de la literatura.
«Ensayos críticos sobre Filosofía, Literatura e Instrucción Pública», «Gran almanaque de las dos Asturias», «Paz y misterio» y «A Isabel II» son algunos de los títulos que forman parte del legado de este español que en 1874 fue parte del tribunal convocado para conceder el Premio Extraordinario de Licenciatura y que, a lo largo de su vida, se destacó también como colaborador de periódicos y revistas como «El Faro Asturiano», «El Oriente de Asturias», «La Crónica de Salamanca», «Revista Ibérica», «La Abeja Montañesa» y «La Tertulia», entre otros medios.
Cabe destacar que quien fuera esposo de Josefa Gayoso, académico correspondiente de las Reales Academias de la Lengua y de la Historia, amigo y consejero del erudito español Marcelino Menéndez Pelayo e integrante correspondiente de la Real Academia Española encontró la muerte en la ciudad de Santiago de Compostela el 12 de octubre de 1890.
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