Fruto del amor entre una húngara llamada Eugenia Wallstein Müller y un peruano descendiente de portugueses bautizado como Armando Carvallo Argüelles nació, el 26 de junio de 1909, Carlota Clara Carvallo Wallstein.
Esta mujer que llegó al mundo en Lima desarrolló varias actividades a lo largo de su vida, destacándose en la rama del arte como pintora, escritora, dramaturga y compositora. La también docente firmó algunas de sus creaciones como Cota Carvallo, mientras que a otras las identificó sumándole a su nombre, su apellido de casada.
Carlota, quien creció en la ciudad peruana de Huacho, tenía apenas trece años de edad cuando le dio inicio a un diario de carácter íntimo al que fue nutriendo con el paso de los años.
En su adolescencia se instruyó en la escuela limeña de Bellas Artes, además de asistir al taller de José Sabogal. Concluyó esa formación en 1933 con excelentes calificaciones y siendo merecedora del Primer Premio de Pintura. El 27 de diciembre de 1934, en tanto, la artista celebró su boda con Estuardo Núñez.
Temporadas después de haber ganado prestigio como pintora, esta peruana que llegó a tener siete descendientes se animó a probar suerte como autora teatral. Originar canciones infantiles y hacer caricaturas para diversas revistas fueron otro de sus desafíos.
A mediados de la década del ’70, Carvallo lanzó la publicación “Urpi”, un suplemento del diario “La Prensa” destinado a los más pequeños y se desempeñó como subdirectora de la revista “ALPHA”.
“Rutsí. El espíritu de la selva”, “Oshta y el duende y otras historias”, “Cuentos de Navidad”, “La niña del espejo y otros cuentos” y “El pájaro niño” son parte de las obras que componen el legado literario de Carlota Carvallo, cuyo deceso se produjo en Lima el 29 de marzo de 1980. A modo de homenaje, en 2014 se reinauguró en la Casa de la Literatura Peruana una sala bautizada como Cota Carvallo.
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