Anduve cansado
entre el mar y la tierra,
entre el invierno y el verano.
No pensaba en lo vano,
me anduve esforzando
por lograr un silencio y un grito
emergiendo del cuerpo.
Anduve cansado.
No pensaba en lo vano.
Sencillamente me quebraba
en dos partes
para discernir
lo bueno y lo malo.
Anduve cansado,
muy, muy cansado,
no pensaba en lo vano,
pero hoy, con un par de derrotas,
me siento con fuerzas
para demoler ilusiones
y me siento ostentoso
y anhelo edificios.
Pues soy un humano
tambaleante y girante
como los productivos molinos
como los animales que comen,
por tanto, me dejo persuadir por las pasiones
y no observo el panorama,
que yo voy destruyendo.
Para contrarrestrar mi locura atiborrada:
el silencio y el grito forjan una alianza
para callar mi vaticinio
y vociferar las realidades.
- Autor: Alfredo Murillo (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 26 de junio de 2009 a las 01:18
- Categoría: Espiritual
- Lecturas: 71
Comentarios3
Wuau, me encandilaste. Felicidades.
Personal y esplèndida descripciòn de ti mismo, algo no tan fàcil de lograr.
Felicitaciones.
Dejame decirte amigo que me alegra conocer contemporáneos como tú.
Que no flaqueen tus fuerzas:
"pero hoy, con un par de derrotas,
me siento con fuerzas
para demoler ilusiones"
Impresionante, tu 'biografía en versos', un abrazo.
Adrian
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