Tócame

Baratza01

PARTE 1

 

Tócame, cuaja mis ideas natas…

Rózalas con tus dedos, oh, maese 

innato del deseo de mi cuerpo.

Hilvana mi rojiza sangre oriunda 

con el libido falo de tu hombría. 

 

Teje por todos los rincones vastos

de mi piel cada letra de tu nombre

y cada percepción con tu impronta…

Usa los hilos carmín de aquellas ganas

que oprimen mi interior, ¡anda, en mi piel!

Hazlo sin la inhibición, sin el miedo  

de quien teme perder lujosas joyas.

 

Ah, mi amante querido, mi señor

y mi amo tan lleno del anhelo 

que brota del jugoso centro rico

de mi flor, oh, pequeño colibrí.

 

 

PARTE 2

 

Ah, mi querida amante, mi invaluable

tesoro, lis, joyel resplandeciente…,

mi pan de Egipto y dicha de mi boca.

La devoción domina mis antojos,

la percepción anexa las caricias

tan tiernas en las yemas de mis manos.

La tersura jovial de tu hermosura

enciende más la chispa del deseo;

anhelo de mi hombría y de mis brazos.

 

Lo amarillo se eleva hacia los cielos

al pináculo de mi sol en aras

y por la admiración de los carmines

de tu boca; la rosa de mi anhelo…

 

Sin duda alguna, eres lo invaluable…

Sin duda alguna, eres lo admirable.

 

Todavía me enredo en tu centro….

 

Hay raíces profundas tan sedientas

buscando aquellos manantiales claros

que se esconden deseosas crepitando

ser la calma esperada para aquellas 

raíces tan sedientas por el beso

refrescante que sacie toda sed.

 

Eres la calma pura para el brío

de mi alma envestida por lo ignoto 

de la fragancia rica de tu cuerpo.

Eres todo mi reino, mis bastiones 

y mis crónicas; luz de mis moradas,

clamor de mis mañanas, hoy te amo.

 

 

 

 

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