Nos entregamos al amor y a la ternura incesante.

 

Estamos en nuestra alcoba envueltos en nuestros brazos,

Se refleja la luz de la luna en la ventana que pega en su arco,

Luz clara de luna llena de mayo,

Llena la habitación con su encanto.

 

Vivimos en un mundo real, nuestro amor no es imaginario,

Mientras caminamos por un bellos y claro remanso,

Nos sentamos y te recuestas en mi regazo,

Te doy muchos besos y recostada te abrazo.

 

Las aguas se torrenciales se detienen en su paso,

Quedan en un pequeño y profundo letargo,

Bajo los frescos y frondosos naranjos,

Mientras te abrazo y te beso en tus dulces labios.

 

Nos envuelve nuestro amor profundo,

Tú te vuelves todo mi hermoso mundo,

Se vuelven nuestros besos cada vez más prolongados,

Nuestros corazones con cada uno se han entregado.

 

Nos entregamos al amor y a la ternura incesante,

Que nacen de nuestras almas y pasiones amantes,

Todo lo que es ajeno a nosotros se hace distante,

Sólo disfrutamos nuestro idilio a cada instante.

 

“A cada beso, a cada instante nos entregamos infinitas caricias, nos amamos con mayor fuerza cada día, tenerte a mi lado es una gran dicha, sentir tu piel suave es una delicia.”