El juego de la vida

Metatrón

Atados a la fuerza los sirvientes al de arriba, 
no utilizan ni una cuerda pues los de alta jerarquía mueven hilos tras las puertas, manejando las cabezas, adquiriendo garantía de alguna pieza cazan presas.

El consumismo desestresa, o eso es lo que me decían peces gordos que interesa enriquecer su economía, da vergüenza el ser humano, entenderemos algún día el gran papel que interpretamos en esta filmografía.

Como una coreografía,
perfeccionas movimientos,
fluidamente los combinas, 
ya según en qué contexto,
la estadística elimina,
mi atractivo si converso,
pues resultan aburridas,
las leyes del universo.

Mira bien cuando caminas, 
ahorrarás varios intentos,
puede siempre que repitas un patrón de sufrimiento y al buscar una salida toparás más de un "experto" que al buscar gracia divina, cobra por sesión trescientos.

Ves a un animal grotesco reflejado en el espejo, cada vez estás más viejo y ya segregas menos testo, 
grita: ¿Y tú de qué te quejas? Si todo esto es un complejo, si la mente no despejas ya hablarás con tu reflejo.

Sobrellevo larga espera,
soy quien a pensar te invita,
pauso el juego cuando muera, antes guardo la partida, 
puede haber un check point fuera, 
realidad alternativa, 
puede incluso que divierta el juego eterno de la vida.

 

 

 

 

 

Ver métrica de este poema
Llevate gratis una Antología Poética ↓

Recibe el ebook en segundos 50 poemas de 50 poetas distintos




Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.