Surgiste entre una noche de cristal
cual sirena de mar cae en la playa.
No sé si fuiste luz, fuegos o cielo,
mas me arrancaste un trozo de mi alma.
¿Eras pelirroja, eras morena?
No lo sé, ¿quién lo recuerda?
Tus labios, exquisitos como fresas,
tus pechos... ¡ay, sabían a manzana!
Mas no sé si eras fruto, flor o carne,
aunque todavía me arda la cara.
¿Eras alta, eras esbelta?
No lo sé, ¿quién lo recuerda?
Tus ojos como ocasos al cerrarse,
y al abrirse... ¡centella de mañana!
No sé si eran azules o morenos,
pero no olvido nunca esa mirada.
¿Eras despistada, atenta?
No lo sé... ¿quién lo recuerda?
Me pregunto si no fuiste cual aire...
o arena que se escapa de la palma.
¡Nunca! Tenías forma de pecado,
y eso a cualquier varón le deja marca.
¿Fuiste musa, fuiste ángel?
¿Mujer? No, imposible...
Iraultza Askerria
http://iraultzaaskerria.wordpress.com/
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Autor:
Iraultza Askerria (
Offline) - Publicado: 20 de septiembre de 2010 a las 15:55
- Categoría: Amor
- Lecturas: 78
Offline)
Comentarios2
Poeta yo estoy leyendo tus lineas. Me han gustado...verdaderamente, reciba un cordial saludito de mi parte.
Gracias Kalita. Un saludo cordial también de mi parte.
Precioso poema hilvanado con los contrastes de lo que se recuerda con lo que se ha olvidado... Un lujo de leerlo.
Un abrazo, amigo.
Gracias por el comentario. Un poema de recuerdos y de olvido.
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