La luna reconocía nuestros rostros
encapuchados de ideales,
tu cabello, rosamente teñido
se inmortalizaba en las barricadas.
La luna nos vio divagando
entre humos y consignas,
la luna te miró cantando
aleluyas de libertad.
Las estrellas iluminaron las paredes
donde plasmamos nuestro evangelio,
la noche te dejó en Managua
mientras me volvía un extranjero.
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Autor:
José Alberto Montoya (
Offline) - Publicado: 11 de abril de 2022 a las 16:25
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 47
Offline)
Comentarios1
Qué realidad tan dura, por Ud., pincelada con extremada belleza. Mis respetos Poeta.
Muchas gracias, Raiza. Nuestros pueblos también son poesía, saludos.
En especial nuestro pueblos y su gente. Lindo día poeta.
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