Designados

Sunny Starr

Unos labios me han besado. Labios dulces, labios hermosos. Labios de hombre. 

Besan mi sonrisa. Provocan mis besos, se ofrecen para ser besados. Y yo ... Yo los beso. 

 

Esos besos de hombre son los más suaves, los más tiernos, los más entregados. En mi rostro, en mi cabello, en mi cuerpo. 

Y mis labios felices se aproximan a besar esos brazos. Ese cuello, esa barbilla, esa nariz... Esa boca. 

En un momento de locura, de éxtasis, de intimidad. En un instante de la vida. 

Pero aun así, aún así ... Hay unos besos en mis labios que aguardan por usted. Que los tengo aquí guardados, ninguno de ellos se ha escapado. Bueno ... Solamente en suspiros. 

Son los besos más tímidos, pero que le quisiera entregar... Junto a unas caricias en su rostro. Caricias de mis manos que seguramente en ese momento van a temblar. 

Usted no sabe cómo añoro ese momento. 

Estos besos son para usted. 

Para usted solamente. 

Y son tantos, que no me va a alcanzar nunca una noche para poder entregarlos. 

Tal vez con solo uno que yo me atreva a darle, mi vida misma estará compensada. Así viva 100 años más. 

Caricias para sus manos también poseo. Para cada pliegue, para cada dedo. Para ambas manos. Ni un centímetro de las suyas quedará sin ser adorado por las mías. 

Y tengo más. Tengo más para usted. Tengo miradas. Para descubrir el universo de su interior. 

Tengo sonrisas. Para demostrarle lo mucho que me importa. 

Tengo piel. Piel que usted puede acariciar. 

Tengo un manantial que puede comenzar a emanar tan solo si usted besa mi boca. Y después puede brotar más y empapar la resequedad de sus valles y colinas. 

Volviendolo a usted a la frescura de la primavera. O evocarlo a un calor exquisito de verano. 

Provocando un placer hermoso en ambos. Al mecernos en suave vaivén. Los dos muy juntos, los dos siendo uno. 

Mas no ocurre. 

El encuentro de sus tierras y mi lluvia no acontece. 

Porque usted se oculta. 

Porque usted teme. Porque usted ve su cuerpo como algo que ya no florece. Y mejor se oculta de la lluvia, porque le gusta estar en calma. 

¿Por qué no viene? 

¿Por qué no se acerca y me pide un poco de agua? 

Todo lo que soy y lo que tengo es solamente para usted! 

Además de que hay besos exclusivos para sus labios en los míos.

Pero ... 

¿Cómo va usted a saberlo? Si yo permanezco en silencio 😞

  • Autor: Sunny Starr (Offline Offline)
  • Publicado: 9 de agosto de 2021 a las 02:14
  • Categoría: Sin clasificar
  • Lecturas: 26
  • Usuario favorito de este poema: Lualpri.
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