Recuerdos en claroscuro

Luis Alberto R

Cuando niño me asombraba el que la luz adelgazada por las rendijas, mostrara universos diminutos. Mi madre decía que era polvo, sonreía, me acariciaba a manos llenas y caricias y seguía en sus cosas, observándome a distancia de la magia. Yo era privilegiado. Tal vez escogido. Como un invitado de Dios a ser testigo.
Y mi mirada abarcaba esos pequeños mundos sorprendidos mientras flotaban y existían. Se alegraban con la brisa que corría tras el calor y danzaban en espiral en un baile de salón. En ocasiones yo les silbaba y parecían tener el ritmo.
Nunca fuimos amigos. Solo vivían sus caminos sin compartirme sus secretos ni parecían escuchar los míos.
Eran mis compañeros transcurriendo al capricho del efecto.
Y a veces estaban quietos. Sin tiempo. Como en aquella tarde aletargada y solitaria en mi cuarto de castigo.
Recuerdo que cuando entró más tristeza a acompañar a la que estaba, todos los mundos caían hacia su muerte en el piso. A las seis, nos asustó el terror de la oscuridad y el frío colándose por entre las grietas. Y yo soplé suave y despejé un espacio sólo mío para también morir de realidad durmiéndome junto a las motas, cadáveres de sus vuelos. Y soñé que creaba mar con mis lágrimas pequeñas para escapar de todo, encerrado en una botella. Y en el cementerio de polvo practicaba mi mensaje: mamá, cómo llego donde vives, allá donde estás muerta ?

#LuisAlbertoR

  • Autor: Luis Alberto (Seudónimo) (Offline Offline)
  • Publicado: 16 de julio de 2020 a las 23:22
  • Categoría: Sin clasificar
  • Lecturas: 21
  • Usuario favorito de este poema: Alberto Navarro..
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Comentarios1

  • ..........................

    Qué belleza observo en este poema en prosa lírica, hermoso. Bella metáforas que reflejan tu decir salido del alma. Un gusto venir a leerte, poeta. Saludos desde mi caliente Cali. 32 grados a la sombra.

    • Luis Alberto R

      Gracias por leerme y gracias por tus palabras, Lucía. Bienvenida, siempre. Saludos desde mi fría y bella Bogotá ensoñando la tibieza que nos daría la calidez caleña.



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