EL HAREM

Él tenía un harem

De otras como yo,

Y además una mujer

Que lo osa mantener,

Mas estúpida no puede ser

Para eso tiene gran nivel.

Hablé con vuestra plebeya

El otro día

Lastimosa en su discurso

Pero por lo idiota

No me conmovía.

Detesto a las mujeres

Que sienten aversión

Dentro suyo

Y por fuera se camuflan

De libertina despreocupación

Para proseguir

Con la ficción de felicidad

Que no sienten ni pueden causar.

Y lo único que tienen en mente

Es ser la anfitriona

Del miembro de sus novios,

Cuando ellos ya están

En el paraíso del hedonismo

Placer de los placeres

Mujeres sobre mujeres

Parvas de sexismo

Y ellas bailan en el abismo.

Esas mujeres y su tonto deseo

De marcar territorio

Como si fueran animales

Meando la selva,

Involución total

Regresión emocional.

Sé que no voy a aguantar

Ese desnivel sentimental

Que hace que un simple

Zángano se sienta un semental.

Es mejor ser la amante

Así no hay que arreglar

Lo que rompes,

Ni ser emblema

De la póstuma estupidez.

Esas mujeres son

Un cuatro de copas

En la baraja de la vida

Y del amor comen migajas.

Corren con su chango

En el mayorista de chongos

Buscando ofertas

Y agarran las rebajas

Y solo las conquista

Ser parte de alguna lista.

La vergüenza ajena

Es su mayor orgullo,

Antes que ser como ellas

Del harem huyo.

Su construcción amoral

Es un derrumbe sin igual

De dignidades cercenadas

Para ser una sota

A la que azotan

Con desplantes aflorales.

Su protagonismo

Es ser sticker repetido

El extra que está dispuesta

A pegarse en sus pieles

Cuando todos se hayan ido.

Y han tenido

Que borrar su propio rostro

Para participar

De la función del harem

Que es dejar de ser vos

Para encajar con el guión

Del femenino patrón

Que acepte dejar de amarse

Para amar sin devolución

A un harem que te parte

Para formar parte

De la póstuma ridiculez.

Prefiero ser dueña

Del fuego de mi latir

Que ser de la plebe

Y arrastrarme en el fango

De olvidar mi nombre

Por un hombre

Para poder sentir

La inquina del harem

Una triste chispa fría

Que el cuerpo sexual alquila

Y el ánima mujeril aniquila...

JULIETA IALLORENZI

PATENTADO EN SADAIC Y DNDA

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