Te quiero aquí, para acompañar mis pasos, sentenciados al fallo de un abrazo...
Espero ágilmente correr a tus brazos, y tal vez podamos comprender que sólo el tiempo podrá arreglarlo...
Te apetezco oliendo la vida y convirtiendo nuestros malos días en una inesperada sonrisa... Anhelo conocer la intensa magia de los momentos, y entregarme completamente a su son, con todo lo que tengo.
Comentarios1
Bonito.
Gracias.
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