Le Pendu.- (11/10/2017).-

Necrofagotimes

Te espera la ceguera infinita y fresca, cual vieja amiga ponzoñosa.
Bajo astros tumultuosos, el océano donde todos siempre duermen apenas si late.
Tú lo sabes y tiembla tu labio,
          ¿Cómo era el dicho del profeta en su tierra?
          ¿Dónde te sentiste por fin en casa?
Apenas si puedes pararte pero el pampero te acompaña.
Si pudieras hacer algo con esta vida cansada,
          Arrugada, rasgada, tísica.
Si te quedara alguna resistencia que oponer
          Ante tanto vapuleo de tus íntimos huracanes.
          Ante tanto deseo roto cual souvenir de fiesta del pariente.

 

Despierta, chiquillo de barro, afuera arrullan los pájaros
Y la mañana es dorada y eterna como el polvo de tu infancia.
Despierta, que redoblan tus campanas
Esas que escuchabas antaño cuando te vestías de esperanza.
          ¡Esta unción por fin te mojará!
          ¡He aquí el cristal roto por el que siempre temiste caminar!
Desembarázate de tu sangre, niño cobarde,
Sufre estóico y podrido en el silencio de los grandes.
Afloja el torniquete de la brillante herida
          Y luego
          Tan sólo quema las cartas.

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  • Autor: Necrofagotimes (Seudónimo) (Offline Offline)
  • Publicado: 11 de octubre de 2017 a las 03:36
  • Categoría: Sin clasificar
  • Lecturas: 27
  • Usuario favorito de este poema: Alberto Escobar.
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