Quien me enseñó que el amor duele pero vale la pena.

En mi presente, en nuestro pasado y en tu futuro.-

 

Ayer te vi, estabas tan diferente

Ya no te recordaba como antes

¿Sabes? Me gustó verte

Fue mágico aunque no me miraste

Estabas tan distraído en tus pensamientos

Estabas como de costumbre en tus sueños

Quise abrazarte pero no pude

Quise hablarte y no encontré  las palabras

¿Qué te podía decir, si te lastimé con ellas mismas?

Como sanar la herida que dejé en tu mirada

Ya no eres el mismo

Tu sonrisa ha cambiado

Tu mirada no tiene el mismo brillo

Me siento culpable, sino te hubiera enfrentado nada de esto sería igual

¿Qué es peor para el amor que el odio?

El olvido y es lo que pasa ahora

Ya no me recuerdas mientras que yo te tengo presente

Todo es mi culpa, mis palabras te condenaron a esto

Te convirtieron en lo que veo ahora

Te pido disculpas porque en mi canto de dorada ruiseñor

Se te despojó de tu gloria gallarda y te arrancó de tu rostro, tu sonrisa halagüeña

Perdón por haberte condenado a este holocausto de cantos pasados

Pero esa era yo y no podía transformarme en lo que nunca quise ser

Nunca creí que tendría vida después de haber salido de tu mente

Me apoderé de ti y te condené al mundo blanco con voces a tu alrededor

Lo lamento con todo mi ser, con toda mi mente y mi alma

Pero me diste vida y ahora, ahora estas donde deseaste estar

Estas arrepentido lo puedo ver por eso no se consuma tu olvido

Cuando no divagas en tus pensamientos vuelves a ser tú mismo

Y vuelvo a aparecer yo

Te quiero pero también quiero que me olvides para que salgas de esto…

Baja tu sombra de encima de tu cuerpo, no hagas todo más fácil

Te mando un beso desde esta vida, te extraño y añoro tu llegada.

Sello esta carta con la tinta de nuestros recuerdos, aquella tinta que nos une en un solo cuerpo...