Soy hijo de un obrero,
de un humilde albañil
soy hijo de jornalero,
con orgullo yo lo digo
y bendigo su recuerdo,
con su trabajo y sudor
me dió lo poco que tengo.
Hay una encina arraigada
en el fondo de mi pecho,
con sus ramas mutiladas
por el dolor y el silencio,
gravita en las altas cumbres
con alas de seda su recuerdo,
sembrando manantiales
en los azules del cielo.
Obrero soy, y con orgullo
lo pregono por donde voy,
como la flor en su capullo
me abro, luego me doy.
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Autor:
ADANS BECMAN (Seudónimo) (
Offline) - Publicado: 23 de marzo de 2017 a las 10:53
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 42
- Usuarios favoritos de este poema: luna ponce, antuan conde.
Offline)
Comentarios2
Poema escrito con el corazón, y que llega al corazón, amigo.
El reconocimiento amoroso a una de las personas que te dio la vida y te ayudo a crecer y a ser el hombre que eres hoy.
Un placer leerte.
Bienvenido.
Un abrazo.
me hace recordar mis raíces, la tierra donde crecí. muy hermoso poema
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