Soledad...

Alexander Cambero


Quizás nunca leas estas líneas. El destino muchas se encarga de transformar en invisible al fondo de las historias, los capítulos de la gran novela van quedando en el rezago de la cotidianidad, van muriendo de mengua, mientras el tiempo construye su imperturbable reloj de arena. Solo queda soñarte con la misma intensidad de aquel que solo tiene corazón para quererte. He visto morir la tarde en el brillo de tus ojos, has renacido en el fragor de la mañana, con la misma intensidad de un gran amor que se resiste a formar parte de un sepulcro. Contigo he cruzado el desierto de dunas con aires calcinantes, leguas que mueren en los pasos que persiguen tus recuerdos. Senderos de arena que son infinitas muestras del hombre y su soledad. Remolinos de angustias con semblantes telúricos del desafío. Solo escucho al corazón que lleva la brújula de tu alma entre sus alforjas. El amor con atuendo de misterio para lograr sobreponerse al no tenerte. Solo me alumbra amarte con tal locura que la oscuridad recibe el reto de una pequeña luz, que se cuela entre las rendijas del imperio de las tinieblas; esa mínima manifestación de vida es el sentimiento que mantiene la esperanza hasta la última gota. Un hombre sin armas ni ejército, con sus oportunidades reducidas al olvido levanta su espada para gritarle a los vientos lo mucho que te ama. Posiblemente su grito desgarrador no sea escuchado, estas palabras sean baladíes muestras de un esfuerzo inútil; una batalla condenada a fracasar ante los contingentes del tiempo, sin embargo, en este corazón vivirás en el templo que jamás será sepultado, el más grande amor llena mis venas de ti...


De Gaviota Romero.
Soledad puede sentir a un rodeado de gente.
Cuando un amigo se va, cuando se marchan los hijos.
Soledad, ¡ahí! Soledad si se muere un ser querido.
Si el amor ya se marchó, si los sueños e ilusiones no alegran tu corazón.
Soledad, si vez mentiras en lo que creías verdad.
Cuando vez tu sombra sola, si no tienes unas manos
que te ofrezca su amistad.
Cuando acuden a tu mente los recuerdos de tu infancia.
Si sientes tus manos frías, y no hay otras que las pueda calentar.
Cuando dejas de ser niño.
Si no conoces a Dios, y no sientes amor por nadie.
Soledad, será tu vida si no escuchas una voz.
Cuando una canción te traiga, aquellos felices días.
Hurgando en esos recuerdos, cualquier tiempo pasado nos parecerá mejor.
Por todo esto soledad sentirá el hombre, mientras pueda recordar


¡SOLEDAD...!
¡Mi amor...no era un amor de pasatiempo
yo te quise y te quiero de verdad
te querré igual en el correr del tiempo
a pesar que de mi te has de olvidar...!
¡No te guardo rencor...es solo pena
la pena de haber sido y ya no ser..!
¡Creí ser como sangre por tu vena
y he sido un capricho más en tu haber..!
¡Qué triste soledad le queda al alma
después de un desengaño sin igual..!
¡Yo he perdido la paz y hasta la calma
jamás ha de tener nuevo sitial..!
MARGARITA DIMARTINO de PAOLI


Estas palabras estarán por siempre solas,
si nunca llegaran a ser vistas por tus ojos,
morirán como al llegar a playa mueren las olas,
tendrán un fin igual a todos nuestros enojos.
LL DIAVOLO

Llevate gratis una Antología Poética ↓

Recibe el ebook en segundos 50 poemas de 50 poetas distintos Novedades semanales


Comentarios2

  • Raquelinamor

    Soledad de un amanecer frío, sin el saludo trinar cantarino de los pájaros, sin que de lejos oigas correr las aguas de tu interior, murmullo del viento que traen ruiseñores, quieta frialdad del aposento, soledad de un amor triste no correspondido, diluvio de penas, acechando mis lamentos, ven amor, báñame de tu amor, abre tus puertas , déjame aliviar tu soledad por un momento, y serás, feliz te lo prometo. No hay soledad que no apacique un gran amor como el nuestro.
    raquelinamor

    ¿Que paso? acaso este poema no era fusionado. Bueno así se queda.

  • Raquelinamor

    Felicitaciones por tan hermoso poema que invita a compartir sentimientos, gracias y disculpe mi atrevimiento. Como siempre excelentes letras.



Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.