Siento el barro en mis pies descalzos,
en mis cabellos llevo unos pequeño lazos.
Las hojas secas suenan al yo pasar
y aquel árbol de allá me pone a pensar,
es que parece una nave espacial.
Hay una piedra se ve genial
en ella me puedo acostar
y con la cabeza suspendida el cielo mirar.
Puedo ver los techos de las casas desde acá,
estoy más alto que los demás.
Imagino que vuelo
El viento hace que parezca cierto
hasta siento que me elevo.
Corro por todos lados, grito sin cesar
como siempre, mi mamá me manda a callar.
corro de un lado a otro, de aquí para allá
Ahí estás pequeña niña
¡Al fin te pude encontrar!
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Autor:
Paola Sanchez Morra (Seudónimo) (
Offline) - Publicado: 22 de septiembre de 2015 a las 12:39
- Comentario del autor sobre el poema: Me ha dado por recordar mi niñez, me encanta la niñez, es sencilla, soñadora e imaginativa. Gracias Kavi por la inspiración.
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 104
- Usuarios favoritos de este poema: Trovador de Sueños ...y realidades., kavanarudén.
Offline)
Comentarios3
Esa niña(o) que todos tenemos dentro, florece en tus verbos... sutilmente, encantado de leerte, dulce y querida amiga del alma... Hermoso de principio a fin, llega directo al corazón y cobija el alma, en esa plena libertad.
Cálido abrazo con cariño; ten un sereno día.
Carlos
Muchas gracias Carlos! se sintió muy lindo escribir esto, fue un reencuentro con esa libertad de ser y hacer que nos caracteriza en la niñez. Una vez más gracias por leerme.
Saludos e igualmente un abrazo.
🙂 wow! que contento estoy amiga y lo digo de corazón.
Pude ver esa niña correr de aquí para allá, su sutil figura que nunca paraba, que volaba con su imaginación. Esa niña que es imposible hacerla callar porque a todo el mundo quiere hablar, decir, cantar.....
Sàcala a pasear siempre, habla con ella, rìe, juega.....
Un placer leerte amiga del alma.
Gracias a ti por tu amistad.
Te mando un fuerte abrazo tanto a ti, como a esa tu niña interior.
Kavi
Lo que más debemos preservar y exteriorizar, es a nuestro niño interior, es tan genial cuando volvemos a ser niños.
Tengo un hijo menor que a cada momento despierta mi niña interior y eso no lo cambio por nada, a estas alturas de mi vida sigo jugando con él y haciendo muchas travesuras infantiles jejejjeeje.
¡¡Un gran gusto leerte, amiga, gracias por compartir, abrazos!!
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