La sangre, síntoma, axioma, compañera.
Que en días de lucha, viva, me haces vivo,
que en días de calma duermes
y me haces sueño.
La sangre de mis venas,
se hace aceite hirviendo,
respira en latidos insostenibles,
despierta las alarmas
sacude el alma.
La sangre de mis venas,
se hace charca en calma,
duerme sueños inconcebibles,
se destila en tila y manzanilla,
sestea encima de una rama.
La sangre del color de la lucha,
o del blanco y negro de la derrota.
Eso, nada mas que un color
el color del sol recién nacido,
que como una herida abierta
en la tierra se libera del mar.
Y ya sea sangre que herve
como sangre que derramada
fluye de mis heridas al suelo,
muero tanto en exceso de vida,
como en la soñolienta noche de mi sangre
http://perrosdepaja-angel.blogspot.com.es/2015/05/sangre-sudor-y-sangre.html
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Autor:
Adolfo Lisabesky (
Offline) - Publicado: 7 de mayo de 2015 a las 13:46
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 66
Offline)
Comentarios1
Una sangrienta exposición.. Jejejee!!!
La verdad es una hermosa poesía que me atrevo a decir: dice mucho del temperamento, de la equidad y del vivir conciente en la realidad...
Saludo su magistrales versos amigo poeta...
Abrazos.
Gracias por lo de poeta, no, no llego a tanto
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