Anoche
Anoche me supiste a pan... y a canela con "amor con leche"
y a lluvia suave...
Antes... buscaste a Vulcano entre sábanas genistas
y lo hallaste durmiente… pero no extinto...
¡Por suerte!
Luego vinieron los besos, según estaban prescritos
por los galenos galanes, para abrir los apetitos...
de posteriores manjares.
(Y sabías a jazmín, a Hendel y a luna nueva)... mientras
recorríamos los caminos tantas veces caminados… tantas veces poseídos.
pero esta vez... una senda... dulce, estrecha… infinita
por la que nos adentramos explorando su destino.
Allí esperaban delicias a que fueran derramadas
por nuestras bocas voraces, por nuestros sueños antiguos...
y rodamos como niños por eternos pastos
estallando en alaridos de lujuria y de pecado.
Antesala de la gloria que antes de morir reclamo
**app**
- Autor: abuelopepe (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 6 de junio de 2014 a las 11:09
- Categoría: Erótico
- Lecturas: 63
- Usuarios favoritos de este poema: Hugo Emilio Ocanto
Comentarios3
Menudo panorama erótico-festivo nos describes, abuelo pepe. Sospecho que unicamente es fruto de tu imaginación. Un abrazo
La poesía, como bien sabes, es mejor no descifrarla. Hecho el verso, cada cual es muy dueño de interpretarla a su antojo.
Un fuerte abrazo.
Pepe
la pasión es infinita, y desborda de forma excepcional a tu poema.
Tanto como infinita... dejemos lo en muy larga.
Gracias por tu comentario.
Un abrazo,
Pepe
Muy apasionado poema
versos de historia inolvidable
esos instantes que son un como un manjar
que se queda en un bello recuerdo
saludos
Gracias Natalia por tu amable comentario. Supiste captar la mezcla de sabores y emociones.
Un beso.
Pepe
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