Ausencia

chrix

 Hay un intervalo silencioso

entre las crujientes hojas y la resaca del otoño.

En el hipotético despertar intrincado

de un pensamiento mareando al aire

 que se esgrime frio y espeso ,

un holograma en mi ventana

desnuda al vapor fragante en café

que tiraniza senderos vírgenes de mi habitáculo.

La monotonía pinta muebles y tejidos,

que saben de memoria mil trayectos elegidos,

conocen el  talón venciendo la inercia para dar el paso,

intuyen el sentido de mi desorbitada mirada al devenir

su cauce sobre un axioma en la matemática de lo incierto.

 

Al extraviarme en el sosiego de los cubiertos,

en la madurez del metal que erguido florece

sobre las guerras manipulantes de lo cotidiano,

no encuentro el par en el sobrante del espacio,

y una silla no finge un cuerpo, ni se quiebra el aire

con tu garganta serena.

Dejé un mensaje buscando mi rostro,

al despertar corriendo el vaho de mi espejo,

dejé una pista al armar inconsciente, la mesa para dos.

Era armónico el latir casi imperceptible a mis oídos,

de esas paredes que crujían al paso de mi cuerpo.

Otra vez una cena en soledad consumirá la vela,

sobre la espalda de este otoño, los árboles harán el rito,

y mientras atraviese la ventana , navegaré en todas sus hojas,

secas,  vestidas de lánguidas bufandas, gélidas, pero libres

para  desmayarse sobre el viento.

Un cuadro en movimiento resolverá el acertijo desesperado

donde un hombre se hace escultura  desde adentro hacia afuera,

atado a un recuerdo, compartiendo los fantasmas  prisioneros

al untar de ausencia tanto espacio sin tus besos..

  • Autor: chrix (Offline Offline)
  • Publicado: 12 de mayo de 2013 a las 23:36
  • Categoría: Amor
  • Lecturas: 56
  • Usuario favorito de este poema: Alejandrina.
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Comentarios2

  • Alejandrina

    Me gusto mucho este poema ..saludos de Alejandrina.

  • Shalom Ferrin

    Que se consuma el anillo de oro, en el suspiro de alguien que bien le aƱore, de la soledad y su matrimonio.
    Adorable cantar, angustioso el sendero del sentimiento solitario.
    Le admira,
    M.S.



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