Caía una tenue llovizna
Agua bendita caída del cielo
En la sequía de mi alma.
La mandé vestir de blanco
Le puse entre sus dedos
Un rosario de perlas.
Rechacé el lujoso panteón
La mandé poner bajo tierra
Como heroína de la vida.
Caía una tenue llovizna
Agua bendita caída del cielo
En la sequía de mi alma.
Ruega por nosotros
Ahora y en la hora
De nuestra muerte. Amén.
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Autor:
Miguel Angel Ortigoza García (Seudónimo) (
Offline) - Publicado: 21 de noviembre de 2009 a las 00:22
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 99
- Usuario favorito de este poema: Eugenio Sánchez.
Offline)
Comentarios7
Es una historia tu poema.
Con la brevedad de la eternidad.
muy bueno.
Su
MUY BUEN POEMA, MEZCLADO CON UNA BELLA ORACION
SALUDOS
Esa llovizna me sabe a tristeza y melancolía amigo. Un bello poema pero deseo que no haya sequía en tu alma.
Petonets,
Libra *M*
BELLISIMO
COINCIDO QUE ES UNA PEQUEÑA HISTORIA EN UN POEMA
ABRAZO
Que hermoso poema, has sabido disimular la tristeza con unos bellos versos . por la pérdida de ese ser querido
Recibe un fuerte abrazo desde Trujillo Perú
cuando la tristeza se plasma en un verso aparece el consuelo.Un abrazo amigo
Una bella llovizna que envuelve tu suspirar
claro que se de ti
de tus cosas
de tu andar
Maestro eres tu Miguel
caricias x siempre
sorgalim
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