Llegaré a tus brazos como una suave brisa
de viento de octubre que sin querer te abrigue.
Nuestras ajenas pieles de sabanas vacias
esperan ansiosas un roce sin saberlo.
La distancia ha llenado las mil y un formas
de ignorar nuestro anhelo de un beso,
mientras tus ojos y los mios evitan enredar
más esta dificil manera de querernos.
Te deseo como se desea una bala en la frente.
Tengo tantas ganas de escapar de todo esto,
de tantas noches suponiendo que mis hojas
tristes no se mueven al compás de tu viento.
Este frío de la madrugada mientras me envuelvo
en una frasada abrazado a tu silencio negro,
me hace querer dormir con lo frío de tu tiempo
mientras dura la mentira de lo poco que te quiero.
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Autor:
Uriel (Seudónimo) (
Offline) - Publicado: 10 de octubre de 2012 a las 14:29
- Categoría: Amor
- Lecturas: 141
- Usuarios favoritos de este poema: DAVID FERNANDEZ FIS, Evonth, Rocío V-P., joaquin Méndez.
Offline)
Comentarios2
Amigo,el amor es un fantasma llega cuando menos lo esperas y cuando lega hay que cuidarlo,un abrazo
No creo en los fantasmas, creo en las mariposas que si las persigues se van con el amor entre las alas, con el viento... Gracias por leerme hermano... saludos
Te deseo como se desea una bala en la frente.
Tengo tantas ganas de escapar de todo esto,
de tantas noches suponiendo que mis hojas
tristes no se mueven al compás de tu viento.
original.
mmm me imagino que no es sarcasmo... gracias...
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