Lo mismo e igual, eres poesía.

Lo mismo es de tus ojos la mirada

que viento que libertad quiere dar a tus cabellos,

igual es cielo de nubes claro,

lo mismo e igual eres poesía.

Cómo tu sonreir ha de ser lo no visto

y que a puñados goza el interior del alma,

una bandera que se ondea al viento del amor,

por eso, es que eres poesía.

Por qué, mientras arda fuego en tales ojos,

rebose lo escarlata en sendos labios

y esa belleza sea siempre ilimitada,

es que serás lo que es poesía.

Y podrá llorar el tiempo por no detenerse,

aunque busque el modo de regalarte un instante,

o truncar el mundo el secreto en tu existir,

más no podría, lo que si la poesía.

Lo mismo pues, de todo lo bello tu eres,

el conjunto de toda expresión bien hablada,

la razón que indica que gana el bien;

lo mismo e igual eres poesía.