La última carta...

Una desesperanza tomó mi cuerpo
La inspiración se esfumó de repente
Un frío aire golpeó con fuerza mi pecho
Me estremecí en sólo un momento

Porque te fuiste y cerraste cada puerta
Porque te marchaste sin dejar respuesta
Mi alma busca inútilmente un pretexto
Mis sentidos comienzan a insensibilizarse

Con el corazón latiendo en toda mi piel
Me resisto a creer que todo esto sea cierto
Me envuelvo en unas sucias sábanas negras
Tratando de ocultar este llanto amargo y caliente

No logro respirar en este denso ambiente
Mis pulmones ya casi son insuficientes
Mis dedos se tensan y no responden
Mis brazos se abrazan cada vez más al pasado
Una corriente eléctrica circula por la casa
Y en el espacio vacío de la cama muere una incógnita..

Abro la ventana con frío y la lluvia me moja los ojos
Tiembla todo mi cuerpo sin hallar nada en la nada
Cierro las cortinas para aplacar al miedo
Inhalo el perfecto aire nocturno
Vuelvo a cerrar la ventana con un nuevo aliento
Que rápidamente se disuelve

Intento conciliar el sueño pero no hay caso
Corro a la cocina al sentir unos ilusivos pasos
La mente juega en contra llena de melancolía
Vuelvo más cansada con la frente mojada
Me derrumbo sobre el colchón con un temor llorando
Me despierto sin dormir en una madrugada opaca

Es inquietante agonizar en tanta soledad
Me arden los ojos y me queman los dedos
Mis pies helados buscan algún resto de calidez
El ensordecedor ruido de este silencio me sofoca
La libertad en cada hora más me apresa

Cierro la boca ya seca, partida y áspera
Alboroto un poco más mi cabello negro
Apoyo sobre la almohada mi cabeza ardiendo

Abrúptamente me levanto
Busco unos papeles en un cajón viejo
Sólo fotos, más cartas y recuerdos
Camino hacia el pasillo y quemo cada uno de ellos
¿Para qué guardarlos,
Para que me asfixien más que los que ya guardo?

Vuelvo a esa habitación cerrada y apagada
Un grito emerge desde mis entrañas
Y un sollozo finaliza mi jornada

Vuelvo al intento inminente de poder dormir
Me vence el cansancio y la desolación
Ya casi amanece y yo casi muero
Otro día más que me pregunto que sentido tengo
Esta existecia sin vida es más y más locura

El sol sale y quema en el vidrio
Cuando anoche la luna gélida endurecía mi alma
Recordé que seguía viva
Y lo odiaba..

Ya no se ve lo que se tiene enfrente
Y más aún sí no se tiene nada
Y con un blanco vestido yacía en mi cama
Medio en coma, medio en vida
Me despertaba sin levantar un sólo párpado
Era algo inútil pretender que tenía una razón

Entonces salgo de entre la penumbra
Vuelvo a abrir el cajón ya casi vacío
Saco un cuaderno de hojas amarillas
Una lapicera negra junto a él
Escribo unas letras algo desparejas
Vuelvo a recostarme en el duro colchón
Las seis de la mañana y las horas nunca vuelan
Termino con una prosa semi poética
Como si fuese un diario confesionario
Me despido de nadie
Vuelvo a sumergirme en mis pensamientos
Ya es el fin de este estruendoso cuento
Pongo mi firma y un simpre verso...

Cierro los ojos rojos y cansados
Un insonoro suspiro y muero...

Lau...