¿Por qué digo nada?

 

 

La timidez es una condición ajena al corazón,

Una categoría, una dimensión que desemboca en la soledad. (Pablo Neruda) 

 

 Un día feliz considerado por mucho, es un día sin tráfico,  para mí  5 minutos a solas contigo, Lo sueño, lo imagino y suspiro y aun no te digo nada.

Consejos de eruditos del internet y de sabios de la calle, que la sicología inversa, que la ley de atracción, que la rosas, la serenata y el chocolate. Todo parece tan fácil pero aun no te digo nada.

Por fin 5 minutos y algo mas, te  miro me miras, divago, construyo palabras, dibujo situaciones, miro al piso, las piernas me tiemblan, las palabras se atoran, y tu preguntas con sutulileza, ¿Qué te pasa? Pues vacilo y respondo: nada solo pienso.  Se pierde el momento y aun no te digo nada.

Es Martes no te veo, con mucha cautela te busco, lo consigo, te miro, estas relucientes, hermosa, enérgica, te admiro, saludos fugases, miradas furtivas, consigo hablarte, pero mi tiempo se detiene, disfruto escuchándote, estoy ausente camino por los palacios de  mi mente donde usted, si dulce mengana gobierna los vastos dominios del pensamiento. Vuelvo al mundo real, algo me falta, ya sé y aun no lo sabes, no te he dicho nada.

Pero sabes no solo mi silencio es quien desea hablar, también mis pensamientos gritan y no entiendo que dicen, cuando dejan de hacerlo solo repiten tu nombre, y en su más profundo deseo muere la necesidad de decirte lo que siente, es por eso que aun no te he dicho nada.