CUENTO DE LA MUJER, SOLAMENTE TRISTE

Son las 12 e media de la noche, me ha dado ganas de escribir, de hablar, o mejor contar un cuento mágico, era una vez una mujer triste, sin saber el porqué, solamente triste.

Así fue durante muchos años tantos que no sabía ya cuantos.

Su corazon no sentía mas que tristeza.

Y una noche conoció alguien por internet.

Por lo que escribían se ha dado cuenta que del otro lado había alguien amargado, pero conformado. Y una noche sin saber como lo hizo, lo miró por su cámara, era normal, vulgar, nada sobreseía de bello o raro de su fisionomía.

Pero algo había el qué no lo supo decir.

Así empezó una nueva vida, para su corazon triste sin darse cuenta, empezó a sonreír, a tener luz en su rostro, a soñar imposibles.

El tiempo fue pasando y cada noche hablaban de cosas normales de sus vidas, de lo que hacían.

Llegó un momento que sin saber cómo, se dieran cita en una cafetería. Tomaran un café e cada uno marchó a su hogar.

Nunca más dejaran de hablar y el corazon triste se fue, llegó un nuevo, lleno de esperanza.

La mujer no lo creía, imposible pensaba ella, esto no puede ser verdad.

Ella hizo de todo se presentaba con la cara sin pinturas, trajes sencillos, pero nada resultó en la quería como era, le gustaba mucho, sin forzar la invitaba a tomar un café, a dar una vuelta junto al mar en la explanada, todo puro, todo verdadero. Sin segundas intenciones.

Pasaran meses, cada día tenían más necesidad de estar juntos ni que fueran minutos.

La mujer que tenía el corazon triste, quedó feliz por saber lo que hacía su tristeza, falta de amor!

Ahora juntos en pensamiento, unidos por ese amor grande y dulce, espera que todo sea realidad, que puedan pasar su vida queriéndose, como jamás ha pensado en su tristeza.

El cuento de esta mujer no ha terminado, aun falta el mañana, le deseo que lo tenga junto a su amor e que los otros los ayuden, en vez de separarlos.

Que seas feliz  que de el cielo te manden la juventud eterna para vuestro amor.