La costumbre de hacer de la lectura una actividad entretenida que puede disfrutarse en cualquier lugar y etapa de la vida resulta más natural si se la desarrolla desde temprana edad. El consumo de libros jamás debería plantearse como una obligación, sino como un pasatiempo interesante que contribuye a fomentar la creatividad, a ampliar los conocimientos, a formar opiniones y a dejar volar la imaginación.
En la mayor parte de los casos, cuando se comprueban los beneficios de la lectura y se descubren las maravillosas historias que atesora el universo literario, la lectura deja de ser una práctica esporádica para convertirse en un verdadero placer digno de ser experimentado con frecuencia.
Este hábito que puede ser adquirido por personas de cualquier edad, género, religión y nacionalidad es saludable, enriquecedor y divertido, por eso es recomendable motivar a los más pequeños para que se interesen por los materiales literarios y los valoren como herramientas de ocio y no como elementos vinculados al estudio y los deberes escolares.
Para ayudar a acercar a los niños a los libros, en las últimas horas las autoridades de la ciudad española de San Sebastián han iniciado una campaña que surgió de un convenio firmado por Donostia Kultura y la sociedad Galtzagorri.
La iniciativa, informa el diario «ABC», contempla la puesta en marcha de un programa para promover la lectura y el interés por las historias narradas entre niños de hasta seis años de edad. En este marco, el foco estará puesto en fomentar la costumbre de leer, contar y oír relatos tanto en el hogar, el colegio y las bibliotecas.
El dictado de diversas charlas y algunos cursos dirigidos a padres y profesores serán, en principio, el método elegido para conseguir el propósito de convertir a los libros en compañeros inseparables de los más pequeños.
Comentarios2
Esto es extraordinario, sobre todo que los niños desarrollen la
costumbre de leer, por que les guste, no por ob ligación. Formidable
Hermosa noticia sobre nuevas formas para acrcar a los niños y niñas hacia los hábitos de la lectura, es lo mejor que pueden hacer las personas por sus hijos cuando son pequeños porque después de grandes no podrán inclinarlos en absolutamente nada. Gracias por la bella publicación.
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