Templo de San Agustín de las Cuevas

Manuel Valles

Evoco la luz de un fósforo que alumbre

la compasiva mirada de los santos.

Evoco una ventisca en el campanario

que limpie, de las campanas, toda herrumbre.

 

Evoco las amplias sombras de tu atrio 

y voy camino hacia tu altar y en silencio,

sobre el dolor de mis rodillas me postro,

en comunión con responsos y lamentos.

 

Evoco en las oraciones de mi abuela

la luz endeble de una fúnebre vela

y ante tu altar bendito mi llanto invoca,

de mis pecados, la expiación anunciada.

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Comentarios4

  • El Hombre de la Rosa

    Bellas y geniales tus hermosas estrofas estrimado poeta y amigo Manuel Valles
    Saludos de Críspulo desde España
    El Hombre de la Rosa

    • Manuel Valles

      Gracias amigo, por leer mis poemas. Saludos desde México.

    • Una voz

      Cristo dijo: Deja que los muertos entierren a sus muertos. Y dijo: Soy un Dios de vivos no de muertos.

      Prohibió también contactar muertos.

      Mi pésame por su fallecido ser querido pero le corrijo con respeto la verdadera fe en Dios.

      Dios le bendiga.

    • Salvador Santoyo Sánchez

      Excelentes letras.
      Felicidades poeta Manuel Valles 🙋🏻‍♂️
      Recordé tantas cosas de mi infancia

      • Manuel Valles

        Muchas gracias, Salvador. Este poema está hecho también de recuerdos míos de infancia, cuando acompañaba a mi abuela paterna a misa y veía el templo y las imágenes de los santos y escuchaba el murmullo de los rezos y a mi abuela inclinar su rostro con respeto y veneración. Un saludo, poeta.

        • Salvador Santoyo Sánchez

          Que bien.
          No hay que perder esa costumbre.
          Saludos poeta

        • ElidethAbreu

          Manuel, que hermosas evocaciones has llevado a versos.
          Me ha encantado tu abordaje del tema.
          Abrazos y mis afectos.

          • Manuel Valles

            Agradezco tu comentario, estimada Elideth. Sí, son evocaciones que yo llevo en el alma. Recuerdos de mi infancia que permanecerán conmigo hasta el último día de mi existencia. Un abrazo para ti con todo mi afecto, poeta.



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