Ese ruido subyacente, que no deja mi alma en paz,
cantar de grillos en la madrugada
voces disonantes que se van apoderando de mi sueño,
que alejan cual peste a Morfeo.
Insomnio y locuras, pensamientos locuaces, imparables
carretillas de voces rotas.
Imparables como una cuadrilla al tropel, de aquí para allá,
brincando de un lugar a otro, de un allá para acá, de un adiós
a una llegada.
Locura que me persigue cada madrugada aporreándome
hasta el amanecer. Exhausto, solo deseo refugiarme en tu piel.
-
Autor:
mauro marte (
Offline)
- Publicado: 25 de agosto de 2025 a las 22:23
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 40
- Usuarios favoritos de este poema: Una voz, Mauro Enrique Lopez Z., El Hombre de la Rosa, Tommy Duque, alicia perez hernandez
Comentarios2
Cuando esa bella dama se roba el soñar y lo deja en desvelos. Excelente poema.
Dios te bendiga.
Hermoso y genial tu bello versar estimado poeta y amigo Mauro
Saludos desde Torrelavega
El Hombre de la Rosa
Gracias, Poeta, Dios le bendiga
Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.