Hablar del teatro es hacer referencia obligada al escritor ruso Antón Chéjov, que está considerado como uno de los grandes maestros del mismo, ya que dio forma a obras que se han convertido en clásicos como El jardín de los cerezos (1904) o Las tres hermanas (1901), entre otras muchas.
Sus trabajos enmarcados dentro del drama fueron los que le otorgaron un mayor éxito y reconocimiento, no obstante, no podemos pasar por alto que como dramaturgo dio forma a otros que eran comedia y que merecen igualmente ser disfrutados, destacando especialmente los siguientes:
La gaviota
En el año 1896 fue cuando este escritor llevó a cabo la presentación oficial de esta obra que está considerada como una de las mejores y más importantes de su bibliografía. Existe cierta controversia sobre la misma en cuanto a su género, ya que mientras para algunos es una comedia clara, para otros se enmarca más dentro de la tipología del drama.
No obstante, opiniones aparte, merece la pena disfrutar de este trabajo, que viene a mostrarnos la decadencia de las clases más pudientes de la sociedad y de los valores tan absurdos por los que se dejan arrastrar y que mantienen como máxima para guiar sus vidas. Todo eso nos lo enseña a través de cuatro personajes que, además, se verán envueltos en una complicada red amorosa: el escritor Tigorin, una joven ingenua llamada Nina, una actriz venida a menos que responde al nombre de Irina Arkádina y el hijo de esta, un dramaturgo conocido como Tréplev.
Petición de mano
El 12 de octubre de 1889 fue cuando se llevó a cabo en San Petersburgo el estreno de esta comedia de Antón Chéjov que gira en torno a lo complicado de las relaciones de pareja. Lo hace a través de la figura de Iván Vassiliyitch Lomov y de Natalia.
El hombre le pide la mano de su hija, aquella, al padre de la misma (Stepan). El progenitor otorga su consentimiento y es en ese momento cuando comienza la labor del caballero de convencer a la mujer de que le dé el “sí”. Pero no lo tendrá nada fácil. Es más, no paran de discutir por temas banales como perros de caza o propiedades y cada una de esas peleas acaba mal, bien con problemas de salud para el padre de la joven o para el prometido.
Sin embargo, Stepan decide interceder y hacer que los jóvenes se besen y sellen su amor, lo harán pero, al instante después, comenzarán a discutir nuevamente.
Un trágico a pesar suyo
En el mismo año que la obra de teatro anterior, el autor ruso procedió a darle forma a esta, que tiene como protagonistas a dos amigos: Murashkin y Tolkachov. Este último se encuentra atravesando un momento complicado en su vida, porque siente que está cansado de que el resto de las personas que tiene a su alrededor lo único que hagan es aprovecharse de él y de sus buenas intenciones, de que le tengan de recadero.
Su amigo intentará hacerle ver que no es así, que debe afrontar las cosas con positividad y que la vida es mucho mejor de lo que piensa. Con una larga lista de argumentos consigue convencerle, momento en el que aprovecha para pedirle él mismo un favor.
Tres comedias, tres obras de gran calado.
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