La ciudad francesa de Pau vio nacer el 14 de junio de 1874 a Manuel Bueno Bengoechea. Hijo natural de una religiosa vasca y un militar de origen argentino, se crió en Bilbao y vivió un tiempo en un convento, donde se acercó a la literatura.
Varios datos de su biografía son confusos y difieren según la fuente. De acuerdo a la Real Academia de la Historia (RAH), Bueno tenía 14 años cuando se instaló en Estados Unidos para estudiar. Esta versión, de hecho, indica que comenzó su carrera periodística en territorio estadounidense.
Otras informaciones aluden a viajes a Argentina y a Cuba antes de regresar a Bilbao. Lo concreto es que en esta ciudad colaboró con los periódicos El Porvenir Vascongado, Las Noticias y La Lucha de Clases, presentando sus primeros ensayos.
En 1897, Bueno se mudó a Madrid, trabajando para El Globo y otras publicaciones. Por aquella época además dio a conocer su ópera prima literaria: “Viviendo”, un libro de cuentos.
Su producción luego se incrementó con obras como “Corazón adentro”, “Los nietos de Danton”, “El dolor de vivir”, “Jaime el conquistador”, “Poniente solar” y “En el umbral de la vida”, entre otros relatos y novelas. Parte de sus artículos periodísticos, en tanto, fueron recopilados en “Palabras al viento”, mientras que además incursionó como dramaturgo con trabajos como “El talón de Aquiles” y “Lo que Dios quiere”.
Una pelea que mantuvo con su amigo Ramón María del Valle Inclán en el Café de la Montaña terminó con violencia física y la amputación del brazo de su colega, quien sufrió una herida que se gangrenó. Pese a todo, la amistad no se rompió.
Cabe resaltar que Bueno es señalado como el único referente de la Generación del 98 que se mostró a favor de la monarquía y fue cercano a la Falange. Esa postura lo llevó a la muerte: el 11 de agosto de 1936, en Barcelona, el ejército republicano lo fusiló.
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