Diego de Torres Villarroel

Salamanca vio nacer a fines del siglo XVII a Diego de Torres Villarroel, un destacado escritor, matemático, médico y sacerdote español. Hijo de Manuela de Villarroel y del librero Pedro de Torres, se desconoce el día de su nacimiento, aunque sí quedó documentado su bautismo, que tuvo lugar el 18 de junio de 1694.

Diego de Torres VillarroelLuego de estudiar en la escuela de Pedro Rico, comenzó a aprender latín con Juan González de Dios. Más adelante asistió a la Escuela Trilingüe (donde tuvo problemas de conducta) y a la Universidad de Salamanca. De Torres Villarroel finalmente se graduó como Bachiller en Artes y completó estudios de medicina.

De manera paralela realizó su carrera clerical, recibiendo la tonsura por impulso de su padre y después avanzando en los distintos grados, llegando a ser ordenado sacerdote en 1745.

Como autor, De Torres Villarroel se hizo conocido por sus almanaques, que empezó a publicar en 1718. Muchos lectores le atribuyeron carácter profético a varias de sus afirmaciones, sobre todo su supuesto anticipo de la prematura muerte del rey Luis I.

En 1724 presentó “Viaje fantástico”, su primer libro. A partir de entonces incrementó su producción literaria con obras de diversos géneros, como “Correo del otro mundo”, “Sacudimiento de mentecatos”, “Visiones y visitas de Torres con Don Francisco de Quevedo por la Corte”, “Vida, ascendencia, nacimiento, crianza y aventuras del doctor Diego de Torres Villarroel”, “Conquista del reino de Nápoles” y “Los desahuciados del mundo y de la gloria”.

Su existencia no estuvo exenta de polémicas. Para alejarse de las consecuencias de sus conflictos en la Escuela Trilingüe de Salamanca, por ejemplo, decidió instalarse un tiempo en Portugal. En “Vida” narró diversas aventuras y vivencias en territorio portugués que no se encuentran documentadas y se supone que pertenecen al terreno de la ficción. Más adelante tuvo que huir a Francia por enfrentarse a un clérigo en apoyo de su amigo Juan de Salazar e incluso fue desterrado a Portugal por un decreto real.

Diego de Torres Villarroel falleció el 19 de junio de 1770 en el Palacio de Monterrey (Salamanca), donde se encontraba viviendo como administrador de bienes del duque de Alba.



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