La mesa de los cuervos

jesus alberto porras

 

 

 

Me senté a la mesa con todos los cuervos,

la noche partía su pan final.

La ratona trajo pavo roído,

hecho en silencio, sin mirar atrás.

 

—“Mis cuervos”, dijo, “yo siempre los crié,

tienen saberes y posición”.

Pero aun con títulos sobre las alas,

giraban hambrientos sobre mi voz.

 

Y callé, y callé, no dije nada,

dejé que tomaran lo que guardé.

Entre risas negras y platos llenos,

algo de mí se quedó sin ser.

 

La ratona roe mi última parte,

migaja a migaja mi corazón.

Sostengo el plato, finjo estar lleno,

pero en el pecho crece el clamor.

 

No toda mesa es comunión,

no todo abrazo es lealtad.

Hay banquetes que llaman familia

a la necesidad.

 

Ya no callo más, hoy digo basta,

recupero lo que entregué.

Entre cuervos sabios y manos pequeñas,

salí de la mesa…

y desperté.

Ver métrica de este poema
  • Autor: Wuiliam (Seudónimo) (Offline Offline)
  • Publicado: 29 de diciembre de 2025 a las 01:52
  • Categoría: Sin clasificar
  • Lecturas: 2
Llevate gratis una Antología Poética ↓

Recibe el ebook en segundos 50 poemas de 50 poetas distintos




Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.