Soy la oveja perdida, realmente, la oveja perdida.
No la triste, la apesadumbrada, tampoco la descarriada.
Si fuera tu preferida, me llamarías; mi predilecta.
Soy de las tantas ovejas, que tropezaste, y no buscabas.
Satán vestido de lobo cruel, me correteó a su dintel.
Lo engarcé en un picacho, y quedó como cucaracho.
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Autor:
Sierdi (Seudónimo) (
Online) - Publicado: 2 de diciembre de 2025 a las 02:03
- Categoría: Fantástico
- Lecturas: 1

Online)
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