En el laberinto álgido del alma,
donde amor y desamor libran su karma.
Un pathos profundo, en el pecho late,
entre la euforia y el cruel desdate.
El amor, crisol de anhelos fervientes,
emana efluvios de besos ardientes.
Un néctar divino, que embriaga el ser,
en un idilio etéreo, sin desfacer.
Pero el desamor, con su faz sombría,
irrumpe voraz, cual cruel felonía.
Un suplicio acérrimo, que lacera el alma,
dejando una cicatriz, que el tiempo calma.
En la dialéctica aciaga del sentir,
el corazón se debate, sin resistir.
Entre la esperanza, y la desilusión,
buscando consuelo, en la desolación.
Así, el amor y el desamor, conviven en mí,
un dualismo eterno, hasta el confín.
En esta danza agridulce del querer,
aprendiendo a vivir, con mi propio ser.
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Autor:
José de Amercal (Seudónimo) (
Online) - Publicado: 25 de noviembre de 2025 a las 13:23
- Categoría: Espiritual
- Lecturas: 10
- Usuarios favoritos de este poema: Jose de amercal, Emilia🦋, Una voz, Hernán J. Moreyra, Alosno, Carlos Baldelomar, Santiago Alboherna
Online)
Comentarios2
bello poema, me gusta eso de dualismo eterno o danza agridulce, hay mucho de eso en cada uno
Si la vida es agridulce, altos y bajos esa es la vida gracias por comentar mis poemas
Amar y dejar de amar.
Dios le bendiga
Gracias por comentar mis poemas
Le quedo precioso estimado poeta. Es su temática vital, porque al final todo gira entre el amor (Dios) y dejar de amar (hombres). En esa danza el cosmos se escribe.
☺☺☺
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