Salgo a la calle,
a ver a esa camarera de un bar bien,
en su barra sonriente...
In situ, imaginaré,
cómo su azúcar se me funde...
sin decirla nada, sin que me escuche...
Y tomaré su café,
que vincula a la diosa con este cliente,
de un modo apasionante...
Luego, en un aparte,
sobrevino su triunfo y mi desastre,
no sabe ni mi nombre...
-
Autor:
el brujo de letziaga (Seudónimo) (
Offline) - Publicado: 10 de noviembre de 2025 a las 03:03
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 3

Offline)
Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.