Tanto para nada,
pues solo recibí dolor, desdén y sufrimiento.
¿Acaso lo merece mi alma enamorada?
¿Acaso merece mi corazón este tormento?
¿Acaso merece mi alma verse de toda dignidad despojada?
Tanto para nada.
A tus pies caí rendido,
tu imagen en mi ser quedó grabada,
fui una triste víctima del ruin Cupido,
y me desdeñaste como una vil criatura...
Y ahora dime, solo dime, ¿Qué me faltó
para estar a la altura?
¿Qué tiene él que no tenga yo?
¿Merezco esta miserable tortura?
¡Ay!, sé que no soy suficiente,
mas lo intento, y juro por Dios
que aunque podrás decir que me faltó mucho,
jamás podrás decir que me faltó amor.
-
Autor:
Un enamorado (
Offline) - Publicado: 3 de noviembre de 2025 a las 15:49
- Categoría: Triste
- Lecturas: 2

Offline)
Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.