Catilinaria

Catilinaria

El mundo está plagado de fantoches
que juegan quién es noble entre villanos;
se escapan las verdades de las manos
y todos se hacen ciegos por las noches.

El mal está imbuido en los derroches;
ponzoñas de políticos infames.
Los locos son los cuerdos, aunque les llames
el orden comercial si son reproches.

¡Periódicos y medios, son ludibrio!
Atacan, mas se niegan al proceso
por ser, ratón que come el mismo queso,
obviando si hay pavor o equilibrio.

¡Quién pide libertad cuando demacra
con tantos proyectiles en el plano!
¿Acaso quién nos mata es un hermano,
si vemos como al pueblo lo masacra?

¡Mefíticos creyentes sin conciencia
que buscan en la orbe su estatura,
se comen a indefensos sin lectura
y dejan en el lienzo su apariencia!

Quien vive en el lamento y en la orilla,
no siembra cosas buenas, solo el odio:
espera cuan rapiña el episodio
y niega así al humilde la semilla.

¡Oh, pueblos que estáis ciegos, despertad!
¡Mirad cómo las fieras se entrelazan
y buscan con dinero y amenazan
al orbe, con comprar la dignidad!

¡Despierta hermano mío, no seáis ciego
y toma la batuta de tu vida!
¡Ya deja de cubrir la ajena herida,
procura no caer al mismo juego!

                      Samuel Dixon