Vidrio o hierro abriendo la noche.
Lumbre o fiebre de lapislázuli
cruje en auroras de afinidades risueñas.
Susurros en caricias, cometa celeste.
Chispas en la grieta del sol.
Los nácares nocturnos recobran su aliento
de fulgor inocentes,
mientras despiertan en ellos
los ruegos y las horas de pompas errantes.
En el borde del cielo, dulzura de pudor
en la burbuja perpetua del fuego.
Reposos de niños en brisas breves
bajo miradas del firmamento.
Las orillas guardan la flor tibia de tus huellas.
Se pronuncia la mansa marea.
Se trazan los rostros, anclados en gozo.
Una nada con ademán dentro de la sustancia
del amor.
Registros de días de cuerpos amantes:
se disuelve el instinto entre pausas de viento.
Los comienzos rozan las cumbres de la magia.
La meditación del mundo
es un acto secreto en lienzos flotantes, donde
la vida a veces con ingenio la busca.
Ivette Mendoza Fajardo
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Autor:
Ivette Mendoza Fajardo (Seudónimo) (
Offline) - Publicado: 24 de octubre de 2025 a las 06:20
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 2

Offline)
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