Cuando me decís: "te quiero",
simplemente me estremezco,
y dejás tu gran tatuaje
en mi piel cual firmamento
y rúbrica de tu tinta
que atraviesa el pensamiento.
Cuando me decís: "te quiero",
el mundo se hinca ante mí,
y desbarata vigilias
que sacuden mi existir.
Pues tu fuerte conjuro
arrasa y revive mi muerte,
como una ilusión arcana
que persuade mi simiente.
Pues tu fuerte conjuro
abre la corola que sostiene
cada una de los filos
que hieren de amor doliente.
Porque es júbilo triste,
no poder tenerte siempre
como infinito y cíclico tiempo
que no cese ni repliegue
su estancia ante la mortaja
o los confines de lo humano.
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Autor:
Poeta De La Otra Esquina (
Online) - Publicado: 22 de octubre de 2025 a las 18:55
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 3
- Usuarios favoritos de este poema: Antonio Pais
Online)
Comentarios1
Estimado poeta de la otra esquina,
Tu poema tiene una intensidad que desarma. La reiteración de “Cuando me decís: ‘te quiero’” funciona como un mantra que convoca lo sagrado del vínculo, y cada estrofa se despliega como una ofrenda de vulnerabilidad y deseo. La imagen del “tatuaje en mi piel cual firmamento” es luminosa y profunda: el amor como constelación inscrita en el cuerpo. Hay una alquimia entre lo arcano y lo humano, entre la herida y el júbilo, que convierte tu texto en un ritual poético. El cierre, con ese “júbilo triste” y la imposibilidad de eternizar el amor, me deja en el umbral de lo sublime. Gracias por compartir esta belleza doliente.
Saludos,
-LOURDES
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