Los días pasan, cual hojas al viento,
y mi vida se esfuma, en lento lamento.
Cada minuto, un suspiro que escapa,
mientras el tiempo, mi esencia atrapa.
Las horas se deslizan, sin compasión,
y la juventud se aleja, en desolación.
El espejo refleja, un rostro cansado,
y el alma añora, un lindo pasado.
La rutina consume, mi energía vital,
y la monotonía, se vuelve mi mal.
Los sueños se desvanecen, en la lejanía,
y la esperanza se apaga, en la agonía.
Pero aún respiro, aún siento el latido,
y en cada instante, busco un sentido.
Aprovechar el tiempo, que aún me queda,
y vivir intensamente, sin ninguna veda.
Porque aunque la vida se esfume, sin cesar,
siempre hay espacio, para soñar.
Y en cada minuto, encontrar la alegría,
de vivir plenamente, cada nuevo día.
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Autor:
José de Amercal (Seudónimo) (
Offline) - Publicado: 18 de octubre de 2025 a las 13:26
- Categoría: Amor
- Lecturas: 37
- Usuarios favoritos de este poema: Jose de amercal, Mauro Enrique Lopez Z., mauro marte, Antonio Pais, alicia perez hernandez, Carlos Baldelomar, Mª Pilar Luna Calvo, Luciernaga 30

Offline)
Comentarios1
Pero aún respiro, aún siento el latido,
y en cada instante, busco un sentido.
Aprovechar el tiempo, que aún me queda,
y vivir intensamente, sin ninguna veda.
A vivir cada momento poeta José, no sabemos cuando el reloj va pa parar y seremos pasado.
Saludos 👋
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